Nicolás Ceroni estaba en una clase del Magíster en Analítica de Negocios de la Universidad de Chile cuando pensó: “Si ya se usa inteligencia artificial (IA) para hacer recetas de alimentos ¿por qué no usarla para recetas de cerveza?”. Y así lo hizo. De hecho, fue su tesis. Les propuso a dos de sus amigos, Javier […]

Nicolás Ceroni estaba en una clase del Magíster en Analítica de Negocios de la Universidad de Chile cuando pensó: “Si ya se usa inteligencia artificial (IA) para hacer recetas de alimentos ¿por qué no usarla para recetas de cerveza?”. Y así lo hizo. De hecho, fue su tesis. Les propuso a dos de sus amigos, Javier Curimil y Gonzalo Arce, que -al igual que él- hacían cerveza por hobby, que probaran esta idea.

Los tres amantes de la cerveza se conocieron en un diplomado de micro cervecería de la Universidad Católica de Valparaíso y fundaron el proyecto de cerveza artesanal Bukana, que desarrolla -aún no de forma comercial- tres líneas: la clásica con seis tipos, la smash (single malt and single hop) y la que denominaron cervecIA, que incluye la American Pale Ale, Cream Ale y American Stout.

“Entre marzo y abril de 2024 nos lanzamos a armar todo. Montamos una planta piloto de 100 litros -unas 150 latas aproximadamente-, tuvimos buenas recetas y nos propusimos formalizar y sacar la constitución de la sociedad en abril de 2025 y ahora estamos en los otros trámites. Tenemos pensado comercializar en los próximos meses”, cuenta Ceroni en entrevista con Forbes Chile.

El plan de los tres chilenos es arrendar un espacio en una planta grande y producir allí para, a finales de 2026, llegar a tener una planta propia y alcanzar una producción de 8.000 a 12.000 litros mensuales. 

La línea cervecIA

Cuando estaba armando su tesis, Ceroni investigó sobre implementación de IA en la fabricación de cerveza en Chile y el mundo. “Se hace machine learning para predecir tiempos de fermentación, algoritmos con compuestos químicos de la cerveza, pero nada como tomar ingredientes y con eso voy a hacer una receta, nada como lo que hacemos nosotros. En Chile he visto unas latas que dicen creadas con IA, pero son IA generativa , como si fuera a chatGPT y le pida la receta de una cerveza y se hace. Esto es distinto. Trata de dar una combinación de ingredientes que va a mejorar un score de una cerveza”.

¿Y cómo se hace?

El proceso es exactamente el mismo como si hicieras una cerveza normal, dice el ingeniero civil que trabaja como CTO en The Andes Brands. El beneficio que da el algoritmo que crearon es que acorta el tiempo de hacer la receta -que puede tardar meses de la forma tradicional- porque la IA se encarga de hacer el research y analizar más de 10.000 recetas de cerveza en una plataforma, tomar la evaluación de expertos y entregar insights y gráficos sobre el estilo de la que se quiera crear.

“Por ejemplo, si quieres crear una American Pale Ale, el algoritmo que creamos puede decirte si un determinado ingrediente, un lúpulo, le sienta bien o negativamente dependiendo de la cantidad y así”, explica Ceroni.

“Los resultados que hemos tenido han sido muy buenos. En Chile hay muy buenas cervezas. He probado muchas cervezas artesanales del mundo y la que hacemos en nuestro país es muy buena. Y con las nuestras hemos hecho degustaciones a ojos cerrados y hemos tenido muy buenos comentarios al compararlas con otras chilenas”, agrega.

El plan es de 100 litros que producen actualmente, poder subir a 1.000 y comercializarla, después a 8.000 y luego a 12.000, con un precio por lata entre 3.500 a 4.000 pesos chilenos.

Lee también: Empresa chilena BeFun levanta 3 millones de dólares para consolidarse en Latinoamérica y Europa