Las razones que explican que estos empleadores se decanten por la experiencia laboral son, principalmente, que esta es evidencia concreta de resultados previos en el trabajo (74%); y demuestra autonomía y capacidad para enfrentar desafíos laborales (48%).
El título universitario y las maestrías o cursos de posgrado que complementan la formación tienen un alto valor a la hora de buscar trabajo. La experiencia, sin embargo, sigue siendo el principal factor a tener en cuenta por los empleadores. Según el último estudio de Laborum ““Estudios o experiencia laboral: qué es más importante al elegir un talento”, el 90% de los especialistas en Recursos Humanos de Chile reconoce que prioriza la experiencia laboral por sobre la académica a la hora de seleccionar talento, aunque matiza y que eso no implica que la experiencia académica no pese. “Muy por el contrario: 65% de los consultados indican que los estudios son importantes cuando se necesita de un determinado nivel de conocimiento para cierto puesto”, resalta Laborum.
Un 74% de los encuestados aseguró que aceptó entre 0 y 6 personas sin estudios en los últimos doce meses y un 20% reconoció que quienes firmaron contrato fueron entre 6 y 20 personas. Entre quienes contrataron a personas sin formación pero con experiencia, un 52% de ellos indicó que la experiencia de estos trabajadores fue buena, y un 48% consideró que fue muy buena.
Y entre las razones que explican que estos empleadores se decanten por la experiencia laboral destacan que esta es evidencia concreta de resultados previos en el trabajo (74%); demuestra autonomía y capacidad para enfrentar desafíos laborales (48%) y proporciona conocimientos necesarios para los puestos de trabajo.
Por otro lado, un 86% de los reclutadores afirmó haber contratado entre 0 y 5 personas novatas en el mundo del trabajo y un 14% aseguró que entre sus contratados de 6 a 20 trabajadores fueron debutantes. Estos reclutadores -quienes consideran que los estudios demuestran capacidad de aprendizaje y adaptabilidad- indicaron en un 63% que haberlos contratado fue una buena experiencia, mientras que un 26% la consideró mala y un 7% detalló que el rendimiento del candidato fue muy malo.
“Existen diversas variables que pueden hacer que los reclutadores apunten por priorizar la experiencia o formación. En el caso de Chile, el 6 de cada 10 reclutadores piensa que el nivel de conocimiento que requiere un trabajo es elemental para decidir en qué hacer énfasis; el 47% se orienta según los requisitos del puesto; el 39% se basa en la cultura y los valores de la organización, mientras que el 22% se enfoca a la industria y el campo laboral. Esto demuestra que tanto la práctica como la teoría son importantes y complementarias entre sí, permitiendo a los talentos tener una formación integral, necesaria para hacer frente a los actuales desafíos laborales”, explica Diego Tala, director de Laborum.
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