Según la automotora, aquello provocará una pérdida de 707 millones de euros
Nissan Motor anunció hoy la venta de sus operaciones en Rusia a una entidad de ese país, tras haber suspendido el pasado marzo sus negocios en el mercado ruso a raíz de la invasión de Ucrania, debido a los problemas de suministro y a las sanciones por la guerra.
La operación, aprobada este martes por el Comité Ejecutivo de Nissan, supondrá el traspaso de todos sus negocios en Rusia al Instituto Central de Investigación y Desarrollo de Automóviles y Motores (NAMI), informó en un comunicado la firma nipona.
La salida del mercado ruso supondrá un impacto en las cuentas de Nissan de aproximadamente 100.000 millones de yenes – unos 707 millones de euros-, según la empresa, que no dio más detalles del montante de la transacción.
Con esta venta, todas las operaciones de Nissan Manufacturing Russia quedarán bajo control de NAMI, incluyendo sus instalaciones de investigación, desarrollo y producción en San Petersburgo.
Nissan prevé que la operación se formalice en las próxima semanas una vez reciba el visto bueno de las autoridades, y en el acuerdo ha incluido una opción de recompra de su rama rusa con una duración de seis años.
El presidente y CEO de Nissan, Makoto Uchida, agradeció a los trabajadores en Rusia “su contribución a la empresa durante muchos años”, y señaló que la venta supone “la mejor solución” teniendo en cuenta que la compañía “no puede continuar operando en el mercado ruso”.
La decisión de Nissan va en línea con la anunciada por el mayor fabricante nipón del automotriz, Toyota Motor, que ha cesado sus operaciones en Rusia a la espera de reestructurar su negocio en ese país, o con la de otros fabricantes como Mitsubishi Motors y Mazda, que contemplan cancelar su producción conjunta con socios rusos.
EFE.