La ejecutiva adelantó a Forbes que, de aprobarse el texto tal como está, votará rechazo en el plebiscito de salida
Los niveles de inflación dados a conocer en abril pasado, con un registro de 10,5%, están en el peak más alto desde 1994. Aquello tiene a todas las industrias en un complejo escenario, incluyendo, por supuesto, al sector inmobiliario.
La gerente general de la inmobiliaria Exxacon, Nicole Solé, describe a Forbes que el contexto actual es como una tormenta perfecta.
“El mercado inmobiliario está muy complicado y por varias razones. Venimos del estallido social en 2019, la pandemia desde 2020, incertidumbre y cambios políticos de trascendencia como la Convención Constitucional, elecciones presidenciales y un nuevo gobierno, además de una inflación del tamaño de un buque…”, dice.
La lista sigue. “Una potencial recesión hacia fines de año, y, sumado a eso, lo que nos ha sucedido a nosotros como industria es que han subido los costos de construcción, hemos tenido incertidumbre y contingencia de gran relevancia a nivel normativo y de permisos otorgados que se han anulado por la nueva administración y el gobierno. Además, los bancos han restringido la capacidad crediticia, los plazos de dichos créditos, la exigencia de mayores pies con porcentajes de créditos menores, y un aumento de tasa de interés”, agrega la ejecutiva.
Así, Solé proyecta que para 2023 recién podría empezar a verse el arcoíris tras la tormenta y comenzar a normalizarse la inversión.
“Lo primero que tiene que suceder es que las incertidumbres, principalmente políticas y económicas, tienen que bajar, porque paralizan el ejercicio. Todos los mercados son cíclicos. Hay inviernos unos más fuertes, otros más largos… Este fue largo y fuerte, pero siempre llega la primavera y creo que deberíamos empezar a ver un mejor escenario hacia el próximo año. No este 2022, en ningún caso. Pero para eso es importante saber y tener certeza de que tenemos que seguir avanzando. Si la construcción se paraliza, se paraliza el país”.
Visión del gobierno de Gabriel Boric
¿Qué espera del gobierno que ayude a normalizar la economía?
“Necesitamos un apoyo del gobierno porque movemos la economía, y creo que se está dando de alguna manera. Mario Marcel es un tremendo ministro desde mi punto de vista. Tuve también una charla hace un tiempo atrás con Nicolás Grau y también me gustó mucho su visión. Yo le creo las buenas intenciones a este gobierno, sin duda. Se han mandado chascarros, sí… cuando uno le quiere encontrar un pero a todo, se lo va a encontrar. Tienen una inexperiencia, efectivamente, pero la verdad es que ya estábamos todos hasta el límite de la vieja política, y en ese sentido, si lo que hacen es poder incorporar en su gobierno, como creo yo que lo están haciendo, a personas con experiencia como Carlos Montes en Vivienda, Mario Marcel en Hacienda… Creo que puede hacer un match súper interesante que habla de un Chile nuevo, en el que todos -estemos de acuerdo o no en el proceso- tenemos que cooperar y salir de esto”.
¿Ha tenido conversaciones con la nueva administración?
“Más que conversaciones, como yo pertenezco a distintas organizaciones gremiales me han tocado charlas con varios de ellos, pero conversaciones directas no. Sí creo que debiese concretarse, de todas maneras.
Es importante que se vean las distintas visiones, y la sociedad nos deje de ver como los enemigos, tanto al empresariado como a las inmobiliarias. Es claro que hubo abusos en su momento, pero porque la ley lo permitió. Y algunos nunca caímos en eso, pero en el fondo, yo creo que hay que saber que las intenciones detrás, lo que queremos es ayudar y que estamos para un país mejor, yo lo creo así desde mi corazón. Ese es un sentimiento muy de mujer, y yo soy más mujer que empresaria“.
¿Qué opina del borrador de la Nueva Constitución?
“No soy muy política ni conocedora de los 499 artículos. Ni siquiera me lo he leído, pero sí he escuchado visiones de un lado y de otro. Creo que tenemos que estar abiertos a los cambios. A la gente le cuesta mucho asumir los cambios en todo orden de cosas. Ojalá fuésemos más como los niños en ese sentido. Los cambios traen cosas buenas, pero lo que uno percibe es que van a traer cosas malas.
Yo estoy por rechazar el borrador de la Nueva Constitución, lo digo honestamente, porque hay montones de cosas que a mí no me parecen. La actual Constitución tampoco me parece. Ojalá pudiese haber un punto más intermedio. Lograr una Constitución más transversal en todo sentido.
La propiedad privada se moderó bastante en la CC. Para todos, desde quien adquiere una vivienda con subsidios o para el que la adquiere cuando le sobra la plata, todos tenemos derecho a que las cosas que nosotros con nuestro esfuerzo adquiramos, no tengamos el riesgo de perderlo. Si nos lo van a expropiar sea no a un “precio justo”, porque no sabemos qué significa eso, sino a un valor de mercado, que sí es objetivo y tangible”.
“Hay cosas que se extremaron mucho en la CC y Chile es mucho más moderado que lo que está hoy como resultado de la Convención. Ni la anterior ni esta representan a un Chile completo”.
nicole Solé, CEO de inmobiliaria Exxacon.
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