La campaña espera vacunar a 700.000 niños y niñas en todo el país, con la autorización de sus padres.

Chile inició este lunes la vacunación de niños y niñas contra el COVID-19 a partir de los tres años de edad y hasta los cinco años, medida que beneficiará a más de 700.000 menores a lo largo del país.

“Esta vacuna, además de proteger a los niños, también protege a sus padres, a sus madres y a sus familias, y le permite a los niños poder jugar con mayor seguridad, poder recrearse, poder divertirse, poder ser niños con esa tranquilidad que da el estar protegidos”, señaló el presidente chileno, Sebastián Piñera.

El proceso de inoculación, en el que se utilizará la vacuna del laboratorio chino Sinovac, fue destacado por el ministro de Salud, Enrique Paris, como un “avance muy importante”, superando metas fijadas por el mismo gobierno, en palabras del secretario de Estado.

Exitosa campaña de vacunación masiva

Chile ha desplegado uno de los procesos de vacunación masiva más exitosos del mundo, con un 91,2% de la población inoculada con esquema completo -es decir, dos dosis u dosis única-, siendo además el país que mayor cantidad de dosis de refuerzo ha administrado, según la Universidad de Oxford.

Entre los menores de 6 y 11 años de edad, un total de 2,2 millones ya están completamente vacunados.

Además, son cerca de ocho millones de personas las que ya han recibido sus inyecciones de refuerzo, de un total de 15 millones de habitantes que componen la población objetivo.

La vacuna más usada es la de Sinovac, aunque también se administran en menor medida Pfizer/BioNtech, AstraZeneca y Cansino.

La pandemia, que tuvo su pico más grave entre marzo y junio pasados y obligó a confinar una vez más al 90 % de la población, lleva más de tres meses bajo control, aunque con leves repuntes que aún no encienden las alarmas.

El primer caso de ómicron

El sábado pasado, sin embargo, se detectó en Valparaíso (100 km al noreste de Santiago) el primer caso de la variante ómicron, por lo que las autoridades hicieron un llamaron, sobre todo a los rezagados, a vacunarse para aumentar la seguridad frente a esta mutación del virus.

Por otro lado, el departamento de Estadísticas e Información del Minsal informó el fallecimiento de 30 personas en la última jornada, elevando la cantidad de decesos a 38.531 confirmados desde el inicio de la emergencia sanitaria.

El país, que alcanzó los 1,77 millones de infectados, goza de escasas restricciones en comparación al resto de la crisis sanitaria, sin toque de queda ni cuarentenas y con todos los comercios, bares y restaurantes abiertos.

Los extranjeros vacunados pueden ingresar al país desde octubre pasado a través de cuatro aeropuertos. Las fronteras terrestres permanecen cerradas.

FORBES STAFF / EFE