La meta es alinear el desarrollo de la minería con los objetivos del Acuerdo de París

Grandes empresas mineras agrupadas en el Consejo Internacional de Minería y Metales (ICMM, por sus siglas en inglés) se comprometieron a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para 2050 o a eliminarlas por completo, dependiendo de las metas de cada una, según una carta firmada por más de 20 compañías publicada este martes.

Entre las empresas firmantes están las más grandes mineras del mundo como las australianas BHP y Rio Tinto, la brasileña Vale, la suiza Glencore y la estatal chilena Codelco, la productora de cobre más grande del mundo.

En la carta del ICMM, con sede en Londres, las mineras indicaron que su meta es alinear el desarrollo de la minería a los objetivos del Acuerdo de París sobre cambio climático, aunque la trayectoria de reducción dependerá de cada materia prima y la jurisdicción representada por los miembros del organismo.

“Si bien tenemos objetivos de descarbonización individuales que en algunos casos van más allá de los compromisos colectivos, estos representan una ambición conjunta de las empresas que representan un tercio de la industria mundial de la minería y los metales”, dijo la ICMM.

“Reconocemos que podemos contribuir en ese sentido, no sólo con el abastecimiento de minerales y metales esenciales, sino también creando capacidades de adaptación y resiliencia en las comunidades y los países en los que operamos”, agregó.

El acuerdo busca eliminar los Gases de Efecto Invernadero (GEI) de alcance 1 y 2 (provenientes de las operaciones mineras y del consumo de energía, respectivamente) para 2050, fijar objetivos sobre las emisiones de alcance 3 (emisiones indirectas) a más tardar a fines de 2023, aplicar metodologías robustas de medición y hacer transparente la información mediante certificación externa del desempeño las mineras.

Según un reporte de la firma global de consultoría McKinsey, la industria minera genera entre 1,9 y 5,1 mil millones de toneladas de GEI al año, lo que corresponde a entre 4% y 7% anual de las emisiones de GEI globales.

La mayor parte de las emisiones proviene de fugas de metano provenientes de la minería de carbón y del consumo de energía de las operaciones, según McKinsey.

En el caso de la chilena Codelco, esta se comprometió a eliminar sus emisiones netas de GEI de alcance 1 y 2 para 2050 o antes, y a reducir en un 60% el consumo de aguas continentales en sus operaciones.

Este punto es particularmente importante para Chile, donde el 80% de las operaciones mineras de cobre se concentran en lugares con pocos recursos hídricos, según McKinsey, y para 2040 se espera que sea el 100%.

En todo el mundo, entre una tercera parte y la mitad de la minería de cobre, oro, hierro y zinc se desarrolla en lugares con escasez de agua.

La estatal chilena también afirmó que reciclará el 65% de sus residuos industriales, el 100% de los neumáticos mineros y aumentará el reciclaje de residuos industriales sólidos no peligrosos como aceros, maderas, materiales de embalaje, basura orgánica y chatarras.

“La transformación de Codelco la construimos sobre bases responsables con el medioambiente y las comunidades, porque estamos conscientes de la urgencia climática que vivimos. Nos estamos haciendo cargo de nuestro propósito como empresa de robustecer el desarrollo sustentable de Chile y el mundo, con metas y plazos definidos”, dijo en un comunicado el presidente del directorio de la empresa estatal, Juan Benavides.

FORBES / AGENCIAS