Medioambiente, seguridad alimentaria y arquitectura financiera serán los ejes de la Cumbre

Jefes de Estado y de Gobierno ya están llegando Santo Domingo para participar en la XXVIII Cumbre Iberoamericana del viernes y sábado, en la que analizarán la situación actual de la región y las perspectivas de cara al futuro.

A las llegadas el martes de los presidentes portugués, Marcelo Rebelo de Sousa, y de Honduras, Xiomara Castro, se unieron el jueves el presidente chileno Gabriel Boric; el rey de España, Felipe VI, y el presidente uruguayo Luis Lacalle Pou.

En total serán 14 presidentes y dos vicepresidentes quienes asistan a la Cumbre, la primera que se celebrará enteramente de forma presencial desde 2018, debido a la pandemia.

Se llega a este momento después de 13 reuniones preparatorias en materia de Relaciones Exteriores, Economía, Finanzas, Medio Ambiente y Agricultura, cuyos resultados se presentarán en el encuentro.

El viernes durante el día será la reunión de los ministros de Exteriores y por la noche se inaugura oficialmente la Cumbre en la Fortaleza Ozama de la capital dominicana.

En esta cumbre son muchos los temas que están sobre la mesa, centrados en cuatro ejes: medioambiente, seguridad alimentaria, arquitectura financiera y digitalización.

Y en el centro de todo ello la cuestión de la equidad, como queda reflejado en el propio lema de esta cumbre, “Juntos por una Iberoamérica justa y sostenible”, en un intento por poner freno a las desigualdades de todo tipo en la región: sociales, de género, brecha digital o pobreza.

Boric quiere hablar de migración

El presidente Boric, por su parte, llega con agenda propia a la Cumbre y es para abordar con Bolivia y Venezuela la crisis migratoria y la devolución de migrantes irregulares que entran al país por los vecinos.

“Es una ocasión para tener contactos con las autoridades de ambos países, para poder expresar la preocupación que tenemos como país por esta situación y para poder avanzar en estructurar una instancia de contacto y diálogo que lleve a la adopción de medidas más específicas y concretas”, dijo el canciller Alberto van Klaveren previo a la cita internacional.

Bolivia, con quien Chile no tiene relaciones diplomáticas desde 1978, solo recibe a los expulsados bolivianos y no admite a ciudadanos de otras nacionalidades que usaron su territorio para llegar a suelo chileno.

El jueves el presidente boliviano Luis Arce condicionó cualquier diálogo sobre el tema migratorio con Chile a que los países aborden también el tema del acceso al mar para Bolivia.

Ucrania, Haití y la Unión Europea

Pero en la cita también planeará la difícil coyuntura geopolítica por la guerra de Ucrania y su abanico de repercusiones, junto a la crítica situación de Haití, un tema que preocupa mucho al vecino anfitrión dominicano.

Protagonismo especial tendrán las relaciones de Latinoamérica con la Unión Europea (UE), que España quiere poner en el centro de su presidencia de turno comunitaria en el segundo semestre del año.

En palabras del ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, “España quiere que 2023 sea el año de América Latina en Europa y que América Latina esté definitivamente en el corazón de la agenda europea con un programa de trabajo y de financiación”.

En esta cumbre estará, de hecho, presente el alto representante de Política Exterior de la Unión Europea, Josep Borrell.

La empresa, otro pilar de la Cumbre

Y previo a la cumbre, un millar de empresarios celebran un gran foro junto a patronales, autoridades y organismos internacionales.

Este viernes, en el marco de este encuentro, habrá un conversatorio con presidentes iberoamericanos y en el mismo se espera la presencia de la República Dominicana, Colombia, Ecuador, Paraguay y Portugal.

Después de que los empresarios entreguen a los mandatarios sus conclusiones y recomendaciones de cara a la cumbre y se traspase la Presidencia del Consejo de Empresarios Iberoamericanos (CEIB), el rey de España y el presidente dominicano, Luis Abinader, cerrarán el foro.

Todas estas actividades se llevan a cabo en medio de extraordinarias medidas de seguridad, patentes en todo Santo Domingo y donde hay fuerzas de seguridad apostadas en cada esquina de los lugares donde se celebran los encuentros.

El tráfico se ve desviado al paso de la comitivas en una ciudad donde la circulación ya es de por sí muy complicada. Pero serán solo unos días y en ellos la capital dominicana estará en el centro de las miradas de toda Iberoamérica.

BOTÓN GOOGLE NEWS

Forbes Staff / EFE