Cada usuario tiene que contestar un cuestionario de hasta 70 preguntas y al votante le aparecen los candidatos más afines.

Un grupo de amigos del mundo de la comunicación encontró la solución para evitar que el votante se pierda el próximo fin de semana entre la amalgama electoral de 1.373 candidatos independientes, militantes, activistas, profesionales o académicos para redactar una nueva Constitución: emular una aplicación de citas para que los chilenos encuentren a su match o constituyente más afín.

“Queríamos entregarle información a la gente de una forma que fuera entretenida, que no tuviera que estar leyendo, buscando en internet o escuchando programas de política donde nadie dice nada”, explicó la directora de la app Votamos tod@s, Estela Cabezas.

De todos los candidatos, solo 155 integrarán la convención que redactará la nueva Carta Magna y que sentará las reglas del juego las próximas décadas, un proceso que se inició tras las masivas protestas de finales de 2019.

El funcionamiento de la plataforma es sencillo: cada usuario tiene que contestar un cuestionario de hasta 70 preguntas y, tras compararse las respuestas, al votante le aparecen los candidatos que más se acercan a sus ideales.

Entre las preguntas hay temas tan medulares como la conveniencia de un sistema presidencialista, la desprivatización del agua o el rol del Banco Central, y otros más actuales como la legalización de la marihuana o el aborto.

Para su directora, “las preguntas simplifican mucho la realidad, que es mucho más compleja, pero ayudan a acercar a votantes y candidatos”.

Desde su lanzamiento, más de 32.000 personas se la han descargado y un 70% de los candidatos ha contestado a los cuestionarios.

Nos ha costado llegar más a los candidatos de los partidos políticos (que a los independientes), son menos dados a adherirse a este tipo de cuestionarios porque los saca de la disciplina de partido y de los discursos vacíos”, apuntó la emprendedora.

La app, que es gratuita, busca además “igualar” a los candidatos tras una campaña electoral que se ha visto alargada más de un mes, pues las elecciones iban a celebrarse en abril.

“La representante aymara que tiene un cargo en una junta vecinal tiene las mismas oportunidades de vender sus ideas que un representante del partido Evópoli que vive en Vitacura y que tiene recursos personales para sufragar la campaña”, agregó Cabezas.